El gobernador Pedro Pierluisi reiteró que no favorecía la pena de muerte, al igual que otros líderes políticos y gubernamentales del país, según informó el Podcast de Aníbal.

Como parte de sus razones, el primer mandatario destacó que la Constitución de Puerto Rico no permite la pena capital, sumando que dentro de su carácter personal también se opone a la misma.

La discusión en torno a la pena de muerte se da a raíz del asesinato de Keishla Rodríguez Ortiz, caso con vínculos al boxeador Félix Verdejo, quien tras declaraciones juradas de un testigo anónimo podría enfrentar la pena de muerte por ser responsable de la muerte de la fémina.

Luego de que el Negociado de Investigación Federal (FBI, por sus siglas en inglés) asumiera jurisdicción del caso, Verdejo puede enfrentar la pena de muerte, a pesar de que la Constitución de Puerto Rico no la permita.