Durante el mes de septiembre, surgió una mutación del COVID-19 en el Reino Unido, la cual ha mostrado mayor nivel de propagación en plazos cortos de tiempo, según indica Wall Street Journal.

La novel mutación, ha presentado unos cambios estructurales en el virus, específicamente en la evolución de una de sus proteínas, representando una propagación más rápida al COVID-19 original por 70%.

El hallazgo ha generado otra catástrofe en el Reino Unido y ha resultado en restricciones para viajeros de dicha área, incluso, algunos países han cerrado sus fronteras por miedo a olas de infección de la mutación del virus, como es el caso de Francia. No obstante, aún se desconoce si ha llegado a los Estados Unidos, principalmente porque ninguna muestra de evidencia indica rastros de la mutación en la nación.

La mutación fue descubierta el 21 de septiembre y se ha convertido en la mayor fuentes de casos de COVID-19, adentrando a su nación en procesos de cuarentena constantes, junto con ser los primeros en el mundo en aprobar la vacuna del COVID-19. Además, ha creado una mayor recesión económica en el Reino Unido, la cual se espera que pueda parar con la administración de vacunas y el regreso a una relativa normalidad.