El papa Francisco dijo que algunas personas lo han considerado como una plaga, incluso algunos dentro de la iglesia por su postura ante los pobres y los más vulnerables.

“Pensando en estas situaciones de exclusión y desigualdad me pongo una plaga con mis preguntas. Y sigo preguntando a todos en el nombre de Dios”, dijo el papa.

También hizo un llamado a las farmacéuticas para que liberen una patentes de las vacunas contra el COVID-19 para que estén disponibles para los pobres.

Otro de los llamados que hizo fue a las empresas de minería y madera para que dejen de destruir los bosques, humedales y montañas. Además señaló que están contaminando los ríos, mares y envenenan a los alimentos y a las personas.

Respecto a los gigantes de la tecnología dijo que no deberían permitir el discurso de odio, las noticias falsas, las teorías de la conspiración y la manipulación política. Por otra parte, solicitó que las personas pueden tener un ingreso básico universal y que los países consideren acortar la jornada laboral para dar más oportunidades de trabajo a los demás.

“Este sistema con su implacable lógica de lucro, se escapa a todo control humano. Es hora de frenar la locomotora descontrolada que se precipita hacia el abismo”, manifestó.