El País de las Dos Islas Distintas, Sector Público vs. Sector Privado

Columna de opinión de Francisco Rodríguez Castro, presidente y CEO de Birling Capital LLC.

Se nos había hecho creer que los puertorriqueños éramos un país unido por su sentido de propósito, por su rica cultura, por sus tradiciones, por su respeto por los demás, después de todo, somos un solo país, compartimos el mismo suelo, todos tenemos los mismos sueños y aspiraciones, además de enfrentar los mismos retos y problemas.

Hasta hace unos años se pensaba que la fortaleza del Sector Privado también era la fortaleza del Sector Público, por lo que era responsabilidad de cada puertorriqueño trabajar al unísono para juntos mejorar Puerto Rico.

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Desde 2013, cuando el Gobierno de Puerto Rico eligió la ruta más fácil de la Quiebra y decidió no honrar la constitución al preferir el incumplimiento de la deuda consolidada de $69 mil millones de dólares, ese fue el día en que nos segregamos en dos islas diferentes, habitadas respectivamente por personas del sector público y del privado. La razón, sencilla el Gobierno eligió deshonrar la constitución para continuar pagando los salarios, beneficios y pensiones del Gobierno. Todo sin hacer el mas minino sacrificio para atajar la quiebra del país, No les ha dado ni vergüenza a los políticos el haber colocado a Puerto Rico como la quiebra norteamericana mas grande a la historia.  

Estas diferencias con los años se han vuelto más profundas y marcadas, especialmente después de la orden de las “Ordenes de Cierre” emitidas por la Gobernadora Vázquez. Admito que inicialmente nos pareció una buena idea el cierre; Pensábamos entonces que el Gobierno implementaría un plan abarcador de pruebas de COVID-19 a toda la población y con protocolos estrictos de “Contact Tracing”. Ello además de imponer el uso obligatorio de mascarillas, distanciamiento social entre otras acciones claras. La pobre ejecución ante el COVID-19 del Gobierno de Wanda Vázquez se ha convertido en la peor pesadilla económica jamás imaginada para el sector privado.

Por ello es necesario examinar los desafíos que enfrenta cada sector y como se vive en las Islas del Sector Publico vs El Sector Privado.

La Vida en la Isla del Sector Público:

  • 201,900 empleados del gobierno han estado en cuarentena los pasados siete meses que se cumplen en septiembre 14 y están cómodamente en sus hogares; solo las agencias mas esenciales están trabajando y algunos empleados desde hace poco trabajan en remoto.
  • Todos reciben sus pagos de nómina los días 15 y 30 de cada mes, sin excepción.
  • Sobre un 70% sin trabajar una sola hora.
  • Todos acumulan vacaciones, días de enfermedad, retiro y otros beneficios marginales.
  • Todos reciben seguros médicos gratuitos o altamente subsidiados.
  • La mayoría de las agencias siguen parcialmente cerradas, por lo que muchas no pueden cumplir con sus mandatos y servicios al público.
  • Los servicios esenciales críticos como los beneficios de desempleo, el plan de salud del gobierno, los programas de Asistente Nutricional como un «PAN» de los servicios de comidas escolares no se prestan o escasamente funcionan; Solo hay que ver las filas interminables de aquellos que buscan algún servicio.
  • El Gobierno no ha sido capaz de ejecutar las necesidades de sus ciudadanos.

El Gobierno y todo el liderato político no reconoce que todos estos lujos y la vida de confort que le brinda a los empleados públicos se pagan con los ingresos que recauda de las contribuciones y otros aranceles impuestos por el Gobierno hacia el Sector Privado. Estos mismos lujos que se le han otorgado a la Isla del Sector Publico se la han negado al la Isla del Sector Privado, donde cada día mas se reparte pobreza y hambre.

Nos parece inconcebible que la Gobernadora del Partido que promueve la igualdad, haya creado semejante desigualadad entre el Sector Público y Privado.

La realidad de vivir en la Isla del Sector Privado:

  • El sector privado contrata al 80% de la fuerza laboral del país, con más de 650,000 trabajadores y una nómina que supera los $30,2 mil millones al año.
  • El Estimado de perdidas para el 2020 en Puerto Rico es entre $10 billones y $12 billones.
  • El sector privado trabaja de la mano con las comunidades y entidades sin fines de lucro que en conjunto suman $40 mil millones o el 83% del ingreso total de la economía.
  • En su momento mas alto los empleados del sector privado han presentado sobre 240,996 reclamaciones de desempleo, o el 37% de la fuerza laboral total del sector privado, que, según los números del departamento de trabajo, fue de 654,224.
  • La mayoría de los economistas señalan que el número total de desempleados fue llego a más de 359,000 o el 55% de la fuerza laboral total del sector privado.
  • Los trabajadores del sector privado no solo perdieron sus empleos; pronto perderán su seguro de salud y cualquier otro beneficio.
  • Muchos de los negocios autorizados para operar han sido «Allanados» por agencias, algunos por persecución y los menos con razón
  • Entre 10,000 a 15,000 empresas enfrentan insolvencia con más de siete meses cerrados sin ningún ingreso; las quiebras se cuadruplicarán.
  • Se estima que se perderán entre 70,000 a 100,000 empleos
  • Los hospitales de Puerto Rico han perdido $ 436 millones en desde marzo 15 hasta el 15 de agosto, con pérdidas que diariamente siguen creciendo a un ritmo de $2.5millones por día, sobre 30 hospitales podrían reducir drásticamente las operaciones, y existe un riesgo sistémico de salud en Puerto Rico que, a su vez, creará una crisis humanitaria.
  • Los Hoteles, Paradores, Casinos, y toda actividad relacionada al Turismo ha recibido el peor de los impactos financieros. 
  • Los componentes del sector privado los que se les ha permitido operar marginalmente enfrentar grandes perdidas y retos.
  • Los bancos locales y cooperativas recibirán un golpe enorme debido al aumento de la morosidad de los prestamos desde comerciales, hipotecarias, automóviles, personales y tarjetas crédito, entre otros. Ya en el caso de los tres bancos públicos dicho impacto se refleja en su valor accionario.

Compatriota que lee esta escrito como puede ver en este listado, La Isla del Sector Privado enfrenta insolvencia, quiebras, pérdidas irrecuperables, alto desempleo, hambre y la posible pérdida de vidas si nuestros hospitales comienzan a cerrar, En fin, en la isla del Sector Privado se reparte miseria, pobreza y un desalentador futuro.

Mientras que la Isla del Sector Público permanece sin inmutarse, cobrando su quincena plácidamente y sin afectarse de la crisis y continuara operando así sin consecuencias. Mientras tanto la Isla del Sector Privado se debilita y se destruyen miles de negocios, el Gobierno de Puerto Rico perderá al menos $2.5 billones de ingresos fiscales que generalmente busca del Sector Privado y bien pudiera en última instancia, puede enfrentar lo impensable para cualquier gobernador o político, despedir a miles de trabajadores del sector público.

El Sector Privado representa la vértebra que sustenta, sostiene y nutre la economía de Puerto Rico, un hecho que el Gobierno actual parece desconocer. 

Entonces, si el gobierno no parece capaz de reconocer la importancia monumental del sector privado, pronto se dará cuenta del error crítico que ha cometido al no permitir que el sector privado vuelva a abrir, aunque con importantes salvaguardas,

Nadie debe olvidar que el sector privado no son solo grandes corporaciones, el sector privado también es el cajero, albañil, carnicero, enfermero, cocinero, vendedor de autos, mecánico, contratista, secretaria, mesero, maestro, ingeniero, dentista, médicos y dueños de negocio también.

El verdadero desarrollo de Puerto Rico no será posible mientras nos veamos como habitantes de islas separadas. Sólo lo podremos lograr uniendo voluntades, con flexibilidad y consenso y respetando las ideas, aun cuando disentimos.

Indudablemente hay una percepción errónea de lo que algunos nos llaman el sector privado ‘Grandes Intereses, a lo cual yo les digo claramente que, Si nuestro Gran Interés es Puerto Rico, téngalo usted claro. 

Cada pandemia tiene impresiones duraderas en la población sobreviviente, como fue el caso de la pandemia del cólera (1817-23); que luego de su destrucción, destacó la importancia del agua limpia y adecuada, el saneamiento moderno, caminos pavimentados, acueductos, alcantarillas, baños, todas ellas consecuencias de la desigualdad de riqueza entre los países.

No nos damos cuenta de cuánto cambiará el mundo para siempre. Si Puerto Rico aprende algo de esta crisis es que ningún sector es más importante que el otro, todos nos necesitamos mutuamente no solo para sobrevivir, si no para prosperar.

Que sirva este escrito para hacer un llamado a todos los candidatos a Gobernador que esbocen claramente su política publica para reactivar la economía y alentar al Sector Privado que ha enfrentado la peor crisis de su historia. 

Cada Candidato debe de detallar su planes para Re-Activar la economía y con ello Transformar a Puerto Rico en lugar donde se reparta riqueza no pobreza y en un lugar donde el bienestar de cada ciudadano se protege, sea del Sector Privado o del Sector Publico.

Como dije al principio, El Gobierno y todos los lideres políticos están obligado a responder sobre la razones por la cual todos estos lujos y la vida de confort que le ha brindado a Isla del Sector Publico, Se les han negado a la Isla del Sector Privado.

Puerto Rico el País de las Dos Islas Distintas.

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Francisco Rodríguez Castro
El Sr. Rodríguez Castro es el presidente y director ejecutivo de Birling Capital desde su creación y administra todos los aspectos de su práctica. El Sr. Rodríguez Castro, con más de 25 años de experiencia, ha sido un ejecutivo clave en empresas gubernamentales, globales, multinacionales y públicas, así como un asesor corporativo clave para múltiples entidades en una diversa gama de segmentos de mercado. Ha participado en la estructuración de más de $ 10 mil millones en transacciones de Finanzas Municipales, Corporativas, Comerciales, Basadas en Activos, AFICA y Fusiones y Adquisiciones. El Sr. Rodríguez Castro ha sido director de UBS, presidente y CEO del Banco de Desarrollo Económico y ocupó cargos de alto nivel crediticio en el sector de banca corporativa. También es un líder clave en promover la participación del sector privado en la formulación de la política pública del país apoyando a los gobiernos en sus esfuerzos por lograr y mantener un desarrollo económico sostenido para Puerto Rico. Además de sus funciones administrativas, fue el fundador de la Coalición del Sector Privado, una asociación sin fines de lucro. Como miembro de la junta de la Cámara de Comercio de Puerto Rico a partir de 2006, organizó, fundó y preside la Conferencia de Puerto Rico una conferencia de inversión macroeconómica.
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